Homenaje de David Huerta a Ángel Ortuño en la #FILEM2021
La muerte de Ángel Ortuño cayó como una broma pesada la tarde-noche del viernes 24 de septiembre. Un día antes, el poeta radicado en Tlajomulco de Zuñiga (Jalisco) había avisado, vía Facebook, que se sentía mal... que estaba enfermo. Y aún así, algunas horas después, se dio el lujo de ironizar sobre la muerte (que ya esperaba por él). Yo me enteré de su deceso en este post del editor Fernando Angel Lara:
Y, literalmente, no lo podía creer.
Un día antes, habíamos discutido sobre el carácter imaginario de Jesús de Nazaret en un meme que había compartido vía FaceBook: yo le había dicho que no desinformara a sus lectores, y que leyera la entrada de "Jesús histórico" alojada en Wikipedia. Y él, apóstata hasta sus últimos días, me respondió con ese humor sarcástico que le caracterizaba:
"Amigo imaginario" me había dicho ya, en otra ocasión, obviamente de manera indirecta (y airada), cuando le preguntó de repente a sus lectores:
Y es verdad. Ángel y yo nunca fuimos amigos. Es más, nunca nos conocimos en persona. Pero, leyéndolo, aprendí tanto de él, que quise ser su amigo. Tan fervientemente quise convertirme en su amigo que, incluso, le mandé una solicitud en FaceBook. u.u
Duele. Duele que ya no estés con nosotros. Por ti, conocí a otrxs poetas: a Iveth Luna Flores, a Ramiro Lomelí, a Ánuar Zúñiga Naime, a Iván Rojo, a Jesús Alonso Ovejero y tantos otros que compartías desinteresadamente en FaceBook.
Por ti, confirmé que la poesía no tiene que ver del todo con el género lírico: que hay poesía visual, que hay poesía política. Y, por ti, escribí lo que escribí en Pain on the Haze: poemas que no sirven para alagar, ni para complacer, ni para seducir sino para shockear y confrontar al lector. u.u
Te quise mucho y aprendí mucho de ti. Es una lástima que te nos hayas ido. u.u
Saludos.