En su libro Inside the company - CIA diary ("Dentro de la compañía - diario de la CIA", 1975), el ex-agente estadounidense Phillip Agee reveló cómo la Agencia Central de Inteligencia ayudó a los presidentes Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría Álvarez a planificar, orquestar y ejecutar la represión del movimiento estudiantil mexicano, comenzando por la matanza del 2 de octubre en 1968 y culminando con la represión del "Jueves de corpus" en 1971.
En una entrevista a La Jornada, el ex-agente de la CIA reveló a los reporteros que tanto Díaz Ordaz como Echeverría tenían nombres clave (Litempo-8 y Litempo-14) al interior de la CIA.
Los nombres en clave venían del Proyecto Litempo, entonces el más importante de la CIA en México, dirigido personalmente por el jefe de la estación, Winston Scott, y su asistente, Annie Goodpasture: "Una complicada serie de programas de respaldo operativo a las diversas fuerzas civiles mexicanas de seguridad, con propósitos de intercambio de información, operaciones conjuntas y un constante mejoramiento de la recopilación de datos de inteligencia y de las funciones de la seguridad pública de México".
"A la cabeza de la operación de Litempo está el presidente mexicano Gustavo Díaz Ordaz, que ha trabajado extremadamente cerca con la estación desde que llegó a ser secretario de Gobernación (1958-1964)". Y desde que Díaz Ordaz llegó a la Presidencia, Scott "ha estado trabajando cercanamente con el actual secretario de Gobernación, Luis Echeverría".
En el documental Secrets of the CIA ("Secretos de la CIA", 1998), Phillip Agee revela de viva voz cuáles eran sus funciones como espía en América Latina, entre ellas, observar y reportar las influencias de la Revolución cubana y del comunismo en las diversas sociedades latinoamericanas.
En 1967, Phillip Agee fue enviado a México para ayudar "de cerca" con el espionaje de grupos estudiantiles y obreros relacionados con el Partido Comunista Mexicano. Pero, al enterarse del asesinato de Ernesto "Che" Guevara, a quien conoció personalmente y a quién admiraba, decidió renunciar a la CIA.
Después de renunciar a la CIA, Phillip Agee se matriculó en la UNAM y decidió estudiar la Maestría en Estudios Latinoamericanos, espacio en el que se dio cuenta de los crímenes del Imperio estadounidense en Latinoamérica, a partir de lo cual, decidió escribir su libro.
A 45 años de la matanza de Tlatelolco, ¿dónde están los historiadores no oficiales y los políticos de izquierda que deberían dar cuenta de estas atrocidades?
Saludos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario