domingo, 4 de junio de 2023

Por fin, #DelfinaGobernadora

https://twitter.com/delfinagomeza/status/1665534452733231104/

Seis años después, tras un fraude electoral solapado por el IEEM que otorgó la gubernatura a Alfredo del Mazo Maza, la Maestra Delfina Gómez Álvarez es la virtual Gobernadora del Estado de México.



Después de que, en una inusitada conferencia de prensa, Alejandra del Moral Vela reconociera su derrota en las urnas, Mario Delgado Carrillo, Presidente Nacional de Morena, festejó en medios la victoria de la alianza progresista en el Estado de México.

Momentos después, la propia Delfina reconoció, en su cuenta de Twitter, la señal de su adversaria:


Con eso (y con el 50.6% de las actas electorales computadas), prácticamente todos los medios concedieron el triunfo a la abanderada de Morena, decretando virtualmente la muerte del PRI en el Estado de México (sin olvidar que, al inicio de los cómputos distritales, el PREP le daba una ligera ventaja a Del Moral):


Para las 11:40 de la noche, la Maestra Delfina celebró su triunfo en la Plaza de los Mártires en Toluca:



Ojalá que, tal como la propia Maestra refiere en su discurso, su gobierno sea un parteaguas en la vida política del Estado de México, se gobierne con y para el pueblo, y se fomente una postura de cero tolerancia a la corrupción.


Es increíble que, con tantas denuncias y tantas pruebas presentadas, la Estafa Maestra, por ejemplo, no haya podido ser judicializada de manera pertinente y los responsables de tal desfalco sigan impunes, por ejemplo, al interior de la UAEMex.



Tal como el periodista Francisco Cruz expresó en su charla con AD Noticias, no se le puede dar un cheque en blanco a la Maestra Delfina. Se le debe exigir. En su paso por la SEP, pudo haber hecho muchas cosas a favor de los maestros y no las hizo (por ejemplo, exigirle a las instituciones privadas la inscripción de su personal docente al IMSS). Si va a seguir ese estilo de gobernanza, no nos deparan los cambios positivos que los mexiquenses estamos esperando. Es una dulce victoria pero no hay que confiarnos.


Saludos.

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