https://www.facebook.com/angel.ortuno.902/posts/10158587986298198
Y, de repente,
se puso de moda ponerle una 'e' al final a todos los sustantivos
decirle 'pane' al pan
decirle 'vine' al vino
y funar a todo aquel que no siguiera los dictados preestablecidos por la agenda de género de los gringos
El mundo al revés:
ahora estaba bien mandar a la mierda a la RAE (yo sonreía)
y los lingüistas repetían los lugares comunes referidos en los libros:
'el hablante hace a la lengua'
'la norma está para violarse'
En redes sociales, los usuarios hacían gala de su dominio del Inglés:
'she/her he/him they/them'
y los traductores defendían que 'they/them' pasara como 'ellx/elle' al Español
¡Anarquía total!
mientras las academias de la lengua veían cómo, en pos de una supuesta inclusión, cada quién hacía lo que quería
(el individualismo sobre el colectivismo, ustedes saben)
porque resultó más importante defender cómo hablaba una minoría
que otorgarles derechos y servicios básicos garantizados:
el derecho a una identidad jurídica
el derecho a servicios de salud
el derecho a un trabajo digno
y con el miedo de ser catalogados como 'intolerantes', 'discriminadores' o 'despectivos'
casi nadie refería la enfermedad por su nombre científico: 'disforia de genéro'
y remarcaba que, como parte del tratamiento, se necesita consejería médica y psicológica
(incluso, si es necesario, cirugía)
Y yo pensaba: ¿sabrá más un individuo que cree estar 'bien' cuando se encuentra enfermo? 🤔
Saludos.